Albanchez de Mágina se caracteriza por una singularidad etnográfica muy particular que se resiste a perder a pesar de la globalización. Hay elementos comunes con pueblos cercanos como grupos y jerarquías sociales, las fiestas y tradiciones populares, el cortejo, el matrimonio y la familia, el trabajo doméstico y agrario, pero con matices que hacen que tenga una identidad cultural única.

Son numerosas las fiestas religiosas que se celebran en esta localidad, y merece especial mención las de San Francisco de Paula, que dan comienzo el tres de mayo, y donde destaca la procesión de los hachones, un claro ejemplo de sincretismo religioso, por su origen pagano.

Su gastronomía tiene como base el aceite de oliva y los productos de la huerta, pero también tiene elementos muy particulares conservando recetas de su pasado musulmán como la morcilla de res, y especialmente una repostería muy apreciada dentro y fuera de la localidad, en especial, los almendrados.

Mágina significa mágica o misteriosa, y Albanchez de Mágina conserva elementos de ese pasado mágico, a pesar de que el tiempo va borrando inexorablemente las creencias populares y tradiciones que se remontan a su mismo origen. Muchos siglos de cristianismo han impuesto un modelo de cultura tradicional muy determinado, pero a través de sus manifestaciones se dejan entrever curiosas reminiscencias precristianas en las que la magia está muy presente, magia entendida como una ilusión que pretende dominar o explicar la naturaleza. La superstición también ha estado muy presente. Las largas noches invernales, la impotencia ante las enfermedades y epidemias, el temor a las plagas o a las malas cosechas y la nula formación cultural, han sido un gran caldo de cultivo para ello. No puede hablarse de etnografía de Albanchez de Mágina sin mencionar sus leyendas y en general toda la literatura de transmisión oral. Las leyendas no son meros vestigios supersticiosos de época medieval, son algo más que eso, ya que forman parte de la memoria histórica del municipio, y pueden considerarse una de las partes más interesantes del rico acervo cultural del que hemos sido herederos. Algunas tienen su origen en la creencia en los espíritus de muy diferentes tipos, tanto protectores como malignos, que utilizan la oscuridad para intervenir en la vida cotidiana. Se puede hablar aquí de difuntos, ya que la vida y la muerte no tienen una separación nítida y el difunto podría mostrarse en cualquier momento. De aquí que haya un miedo mágico al finado e incluso al moribundo. Mencionar los seres mitológicos y sobrenaturales presentes en las creencias populares, traviesos duendes, misteriosas brujas, bestias feroces… algunos autóctonos, y otros como los Juancaballos, originarios de pueblos de la loma, pero con localización en nuestra sierra. Con todo lo anterior se ha ido conformando una singularidad etnográfica que, aunque se va diluyendo, se resiste a desaparecer, y conforma la parte más característica de la identidad cultural de Albanchez de Mágina.


Muy importante es la cultura del aceite que constituye la base de la economía local. Existen dos cooperativas aceiteras que son organizaciones muy tradicionales compuestas por propietarios de pequeñas explotaciones. Existen referencias a molinos aceiteros en Sierra Mágina desde la Edad Media. En la Edad Moderna se produce un amplio crecimiento de esta industria. También la cultura del agua está muy extendida. Los manantiales, como fuente de vida, marcaron la ubicación de muchas poblaciones de Sierra Mágina, entre ellas Albanchez de Mágina, en donde existen muchas huertas significando un importante sustento para la población local. Los molinos han formado parte de una cultura agroindustrial peculiar. Especialmente destacable en el pasado fue el uso de la nieve, siendo usada para bebidas, alimentos y medicinas por sus funciones antinflamatorias, antihemorrágicas… El comercio de la nieve fue muy importante. Albanchez de Mágina es el pueblo de Sierra Mágina que posee el mayor de número de neveros con 13, es el que ocupa mayor suma de diámetros: 101,50 metros, es el que disfruta de mayor altura media de ubicación: 2.044 metros (tiene 1 a 2.140 metros, 7 a 2.100 metros, 3 a 1.950 metros y 2 a 1.940 metros).